Un día de mayo de 2009 el gran Dirigente
Tras recorrer el baño y sauna entró en el comedor para innovadores donde estaban puestos manjares deliciosos y elogió los éxitos de la intendencia.
Señaló que el tesoro subterráneo, por muy valioso que sea, era incomparable con la salud de los obreros que son entes preciosos del Partido y de la revolución.