El 11 de enero de 1948, el gran Líder
En el puesto sanitario enclavado en el contorno de la comandancia del centro se interesó por los pormenores de la comida y el tratamiento. Al informarse de que los enfermos deseaban volver cuanto antes a sus puestos, les señaló que ahora ellos eran miembros del centro, pero pronto serán militares del Ejército Popular de Corea y que los ladrones no se atrevían a penetrar en una casa con la cerca resistente, pero podían invadirla si la cerca estuviera frágil.